jueves, 16 de mayo de 2013

Después de muerto

No sé cuánto tiempo llevo muerto... Hace horas que he dejado de respirar y la percepción de mis sentidos se ha desvanecido sin remedio. Lo último que recuerdo sobre cómo estaba mi cuerpo es que estaba arropado por una extraña sensación cálida que me recorría desde las piernas hasta la coronilla, como si de un líquido caliente y a la vez agradable se tratase. Ese extraño líquido, no me abandona, me recorre cada una de las venas y los nervios de mi cuerpo. Estoy distraído. Soy consciente de que se ha acabado mi vida, pero sin embargo, eso no me termina de asustar. Todavía no he tratado de desplazarme, la verdad, es que, aunque no esté completamente acongojado, aun no sé qué hacer, estoy completamente perdido, aun lo estoy asimilando, desorientado es la palabra. Es lógico, la verdad es que nunca antes había estado muerto. Es algo extraño. Me siento como si estuviera dormido, pero realmente soy consciente de todo lo que pienso e incluso, creo que si lo intentara podría transportarme a la historia que más me apeteciera, o vivir las aventuras más apasionantes simplemente con imaginar. Sabía yo, que mis años de práctica en el mundo real, más imaginándome el mundo a mi antojo que viviéndolo en realidad, al final tendrían su recompensa. Sin embargo, ahí estaba, con toda la capacidad que había adquirido y el poder nuevo que me había otorgado tras la muerte y yo aun seguía ahí, en mi cuerpo. Un cuerpo que había sufrido, amado, que se había dejado llevar por pequeños y momentáneos placeres y por otros más costosos y trabajosos de conseguir, menos satisfactorios inmediatamente, pero más útiles a largo plazo... Creo que voy a moverme. No estoy muy seguro de poder aguantar todos estos recuerdos, sabiendo con seguridad que, aunque consiga otro cuerpo... otra vida... no conservaré esos recuerdos... Me pone triste recordar, siempre lo ha hecho. Igual que ver las fotos, no lo aguanto, pero este no es el caso. Ahora comienzo una nueva aventura, la oscuridad que en un principio había invadido mi visión, poco a poco se iba volviendo más y más confortable, según me iba acostumbrando a estar en ella. 
La verdad es que no tengo muy claro aun cómo he muerto, pero tampoco es algo que consiga preocuparme en exceso, de hecho, mira, ya ni me acuerdo. Ahora estoy en otra fase, otra etapa que debo aprovechar. Está claro que esta situación tendrá sus peligros, o tal vez no, eso sólo lo llegaré a descubrir si decido continuar el camino que se me está brindando y comenzar a dominar los nuevos poderes que he adquirido, porque total, si al final voy a estar en esta situación para toda la eternidad, mejor acostumbrarse cuanto antes y luego ya se verá, si no, siempre podré alimentar este césped...

No hay comentarios:

Publicar un comentario